El Complejo Refinador de Amuay, es la principal instalación de refinación de petróleo de Venezuela, ubicada en la costa occidental de la península de Paraguaná, estado Falcón. Junto con la Refinería Cardón y la Refinería Bajo Grande conforman el Centro de Refinación Paraguaná (CRP), competencia de PDVSA. El CRP es uno de los más grandes del mundo.

El pasado 25 de agosto en horas de la madrugada, se registró una fuga de gas propano y butano, que generó una explosión que a su vez ocasionó una onda expansiva de gran magnitud, trayendo como consecuencia graves daños a las estructuras aledañas y al Destacamento Nº 44 de la Guardia Nacional. El martes 28 de agosto luego de cuatro días, las llamas fueron extinguidas en su totalidad. El incidente dejó un saldo de más de 40 fallecidos y más de 100 heridos.

En vista de lo ocurrido y el manejo de información por parte de las autoridades, Transparencia Venezuela elabora el informe “Crisis de Amuay y acceso a la información pública” pues son muchas las interrogantes que un hecho como este genera en cuanto al manejo de la principal industria del país, sus procesos de mantenimiento e inversión de recursos para su mantenimiento.

Cuatro aspectos básicos son tratados en este informe, en el primer punto se presentan datos extraídos del informe de Gestión Social y Ambiental de PDVSA correspondiente al año 2011, en el que destaca la disminución en 49% de los recursos invertidos por la Estatal en saneamiento ambiental y la recuperación de sólo el 19% de las zonas donde ocurrieron derrames. En lo que respecta a Amuay, ese año no se publicaron los estudios de calidad del aire, y no existe información precisa sobre las inversiones y los proyectos ejecutados por la Dirección Ejecutiva de Seguridad Industrial e Higiene Ocupacional.

En segundo lugar el informe da cuenta del manejo de la información en medio de la crisis en Amuay por parte de las autoridades, contradicciones en las declaraciones oficiales, pocas explicaciones, y datos confusos, tal como se aprecia en los casos citados.

El tercer aspecto reúne las denuncias aparecidas en la prensa nacional y regional, que trabajadores del sector han venido realizando desde hace algunos años sobre fallas en los procesos y la falta de mantenimiento, que también han desencadenado una serie de accidentes laborales con víctimas fatales.

Finalmente, como cuarto elemento, responsablemente y haciendo uso del derecho al acceso a la información, se detallan una serie de peticiones de información que realiza actualmente la organización, para esclarecer en qué condiciones opera PDVSA y que lo ocurrido en Amuay no quede impune.

Resúmen Ejecutivo aquí.

Para ver el informe haga click en la imágen

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