Transparencia Venezuela llevó a las aulas de clases el debate sobre los principios y valores fundamentales que apuntalan una sociedad democrática.  La iniciativa se cumplió a través de la discusión del Manual de Integridad Escolar, en el cual se defienden la honestidad, honradez y la transparencia en el manejo de los asuntos públicos y cotidianos. La dinámica busca formar, desde las escuelas, a un ciudadano más ético.

“La prevención de la corrupción y la promoción de conductas más transparentes desde la escuela es responsabilidad de todos”, reza el manual llevado a los planteles educativos.

En el documento se explica como el sistema educativo, en oportunidades, evita incentivar estos debates, considerados polémicos y controversiales, pero en Transparencia Venezuela surge la necesidad que desde la formación temprana se promueva el análisis de temas que permitan dar paso a una generación mucho más sana desde el punto de vista social, lo que resultaría beneficioso para todos.

“La sociedad es un organismo vivo y como tal necesita que cada uno de sus órganos funcione bien. Cada uno de nosotros interactúa influyendo en los demás. Si en nuestra sociedad se palpan la injusticia, la corrupción, la falta de transparencia, es probable que muchos de nosotros actuemos mal”, indica el manual.

Asimismo, se detalla que para combatir los males dentro de una sociedad es preciso abordar las conductas individuales. Si cada ciudadano actúa de manera correcta se aminora la cultura de la corrupción y la poca transparencia dentro de un país y esos valores deben sembrarse desde la infancia.

Dos puntos claves aborda el documento; se trata de la corrección y la prevención; “La corrección está a cargo de las instituciones sociales encargadas de elaborar las leyes y hacerlas cumplir; la prevención en cambio, no sólo debe ser preocupación de las instituciones, sino también de cada uno de nosotros, es decir, está a cargo de todos”, aclara.

El manual, enumera algunos principios y acciones de ética individual que contribuyen a formar y fortalecer la ética social.

En la dinámica llevada a las aulas de clases se reflexiona sobre situaciones que generan conflictos dentro de una comunidad y se evalúan las reacciones o las propuestas de los alumnos para abordar tal escenario.  Se habla también sobre los cargos de autoridad, se realizan encuestas sobre asuntos públicos con actores locales de la comunidad para dar forma al llamado muro de la integridad que implica el respeto por algunos valores como la honestidad, rectitud, bondad y honradez.

“Una persona integra es una persona sincera, clara, prudente, comprometida, auténtica, que habla con la verdad. Este tipo de persona podemos identificarla por tener siempre en la vida una actuación recta y honrada”, detalla el documento.

[et_pb_tags admin_label=»Etiquetas» color=»#ffffff» show_divider=»off» divider_style=»solid» divider_position=»top» hide_on_mobile=»on» _i=»2″ _address=»0.0.0.2″ /]
Share This