La maquinaria roja busca los votos
Fabiola Zerpa- El trabajo detalló el proceso que implementó la empresa estatal Petróleos de Venezuela –dirigida entonces por Rafael Ramírez- durante las campañas electorales para la efectiva movilización de electores simpatizantes del partido oficial (Partido Socialista Unido de Venezuela), durante las elecciones de 2005 a 2010. Documentos y entrevistas con empleados y ex funcionarios, revelaron una red de organización que involucraba a varias gerencias de la empresa –comandadas por la Dirección de Planificación- en la organización y disposición de recursos, trabajadores e instalaciones de la compañía para garantizar una favorable y alta participación en los comicios.
Fuentes internas también indicaron -aunque no lo probaron- que la empresa cancelaba en efectivo gastos de viáticos, transporte y refrigerios para la jornada electoral. Después, la empresa, con los mismos equipos conformados para la movilización, elaboraba informes y análisis sobre la participación electoral, en especial en zonas de influencia de Pdvsa en el interior del país.
Entre las actividades que desarrollaron los empleados de Pdvsa, con recursos de la compañía, estuvieron la instalación de los “puntos rojos” o puntos de concentración del Psuv cerca de los centros de votación de las escuelas; la verificación de la votación de las personas (incluidas en las llamadas listas del 1×10); la provisión de refrigerios para activistas, testigos y miembros de mesa del partido de Gobierno; la entrega de pagos a motorizados y transportistas; el reporte hora a hora a la sala situacional sobre la afluencia de votantes; y la determinación sobre el momento preciso para activar una “operación remolque”. Empleados señalaron que en los procesos electorales se les presionaba a participar en actividades proselitistas del partido oficial.