Violaciones a la autonomía del BCV atentaron contra la estabilidad en los precios
Transparencia Venezuela, 25 de julio de 2018. Una de las causas de la hiperinflación que a diario padecen los venezolanos ha sido sin duda la emisión de dinero sin respaldo por parte del Banco Central de Venezuela, ente con casi ocho décadas de historia que comenzó a perder su autonomía en el año 2002, según refiere la economista Anabella Abadi en su más reciente informe, publicado por Transparencia Venezuela.
En el trabajo titulado “15 años de violaciones a la autonomía del BCV: proceso constante, resultado fulminante”, Abadi enumeró una serie de acciones ejecutadas por el gobierno central que atentaron contra los dos objetivos fundamentales del instituto emisor: la estabilidad cambiaria y de precios.
La economista precisó que las violaciones a la autonomía del BCV iniciaron el 18 de octubre de 2002 cuando se publicó en la Gaceta Oficial extraordinaria N° 5.606, la reforma parcial de la Ley del BCV con la que se modificaron los artículos 65 y 71 y se agregó una nueva Disposición Transitoria.
Abadi destacó que con la modificación del artículo 71, las utilidades declaradas en el período debían ser entregadas a la Tesorería Nacional y no al Fisco Nacional, tal y como se establecía en la Ley de 2001, lo que abrió espacio para establecer el marco dentro del cual el BCV podría transferir recursos, sin contraprestación, al Ejecutivo Nacional, en violación a la Constitución.
El documento también hace referencia a las declaraciones del presidente fallecido Hugo Chávez en 2004 cuando le pidió al BCV el famoso “millardito” para financiar la producción agrícola y dijo que haría cumplir lo que pedía. De acuerdo con la economista, la solicitud del mandatario “encarnaba un franco intento de violación del artículo 320 de la Constitución y del artículo 2 de la Ley del BCV, al intentar subordinar al BCV a directivas del Ejecutivo Nacional”.
La solicitud de Chávez propició que un año después, en julio de 2005, la mayoría oficialista de la Asamblea Nacional aprobara la reforma parcial de la Ley del BCV. Uno de los aspectos que más destacan de la modificación fue el apartado que se agregó al artículo 113 que establece que el excedente de las reservas internacionales iría al Fondo de Desarrollo Nacional (Fonden). “Desde la aprobación de esta reforma, el Fonden recibió miles de millones de dólares a ser administrados de manera arbitraria por parte del Ejecutivo Nacional”.
En el informe Abadi también destaca la Reforma Parcial del año 2009 a la Ley del BCV con la que se autorizó al instituto emisor a financiar, directamente y sin límite de plazos, a empresas e institutos públicos, incluyendo por supuesto a Pdvsa, lo que ha tenido un gran peso en la inestabilidad de los precios. “Cifras oficiales del BCV reflejan una creciente emisión monetaria dirigida a financiar a Pdvsa, la cual registró un aumento acumulado de casi 14.000% entre julio de 2011 y enero de 2017. Esto, sin duda ninguna, generó importantes presiones inflacionarias”.
La reforma a la Ley del BCV aprobada vía Ley Habilitante en diciembre de 2015 terminó de acabar con la autonomía del BCV, según el informe. La modificación contempló que el nombramiento y remoción del presidente del BCV y del Directorio, queda en manos del Ejecutivo Nacional. Además, estableció que el Directorio del ente podrá clasificar información como “secreta” o “confidencial”, con lo que se respaldó la política de mantener oculta cifras clave para la economía.
El trabajo realizado por Abadi refiere que en un intento por acabar con la opacidad del BCV, Transparencia Venezuela interpuso dos demandas exigiendo al ente la publicación de los indicadores económicos esenciales para la planificación. Sin embargo, en ambos casos el Tribunal Supremo de Justicia desestimó las demandas.
“En un contexto hiperinflacionario en que se discute la necesidad de un plan integral de reformas para la recuperación socio-económica del país, resulta fundamental entender estas estrategias, tanto para corregirlas como para identificarlas rápidamente ante eventuales pretensiones de futuros gobiernos de replicarlas”, refiere el texto.